Cada vez más usuarios se atreven a adquirir prendas de ropa a través de internet. Pero hay un problema principal: uno no sabe si le quedara bien antes de adquirirla. Y, en la mayoría de casos, los procesos de devolución, aunque se faciliten, siguen siendo bastante complicados.
Para solucionar todos estos problemas, Amazon dio la noticia el pasado año de la creación de su servicio Prime Wardrobe, que permite a los usuarios del servicio de suscripción del gigante del e-commerce probar la ropa en casa antes de adquirirla.
Hasta hace poco, Prime Wardrobe estaba en fase de pruebas. Ahora, la compañía dirigida por Jeff Bezos ha decidido extender el servicio a todo Estados Unidos, una vez superado el periodo de prueba.
Presencia en el sector de la moda
Esta estrategia de Amazon logrará aumentar su presencia en el sector de la moda, lo cual representa malas noticias para los minoristas tradicionales.
El cliente puede escoger entre 3 y 15 productos dentro de la gama de zapatos, ropa y accesorios, que se envían a su casa. Luego, tendrá una semana para probar lo recibido y devolver todo aquello que no le haya gustado. La caja incluye ya el envió pagado, cobrándose tan solo al cliente por los productos que sí se quede. Este servicio está incluido en Prime, que tiene en Estados Unidos un precio de 119 dólares al año.
Por otro lado, el cliente no podrá dañar los artículos, utilizarlos ni lavarlos, teniendo que devolverlos con todas las etiquetas y embalajes originales, perchas, bolsas de polietileno, cajas, bolsas de polvo y cajas de regalo.
Amazon también quiere “congraciar” a aquellos clientes que no hagan devoluciones para agilizar el proceso. Por ello, si el usuario se queda con tres o cuatro productos se le hará un 10% de descuento sobre los mismos. El porcentaje de descuento se eleva hasta el 20% cuando se adquieren más de cinco productos.